Para la mayoría de los que hemos utilizado Windows en algún momento hemos presionado la combinación Ctrl+Alt+Supr
(Inglés: Ctrl+Alt+Del) para ciertas ocasiones. Esta es una pequeña historia de decisiones y sus consecuencias.
Algunos usos de esta combinación son: para autenticarse en una computadora corporativa, para cerrar aplicaciones, reiniciar el sistema o incluso para lidiar con la famosa pantalla azul de la muerte.
Hoy me encontré con un artículo (del 2013) donde Bill Gates pensaba que haber creado ese comando fue un error.
La historia de esta combinación de teclas data de principios de los años 90, de un ingeniero de IBM llamado David Bradley y fue creado con la intención de ser usado solamente por los desarrolladores del proyecto. Casi 30 años después y nosotros seguimos usándolo en Windows 10.
¿Cuáles son las consecuencias de estas “pequeñas” decisiones en la productividad?
Cuando hablamos de productividad, hablamos de tomar pequeñas decisiones con intención que nos ayudan a evitar distracciones, a mejorar la concentración y buscar recuperar tiempo para dedicarlo a actividades de relajación y diversión.
Desde que empezó mi carrera profesional he tratado de incorporar hábitos para ser mejor y, para mí grata sorpresa, hay algunos que ya cuentan con más de 10 años ayudándome. Si me hubiera preguntado el alcance que tendrían en el momento que los empecé, yo hubiera pensado que estarían conmigo mucho menos tiempo y ahora, es imposible cuantificar el tiempo que me han regresado.
Nuestras acciones, por muy mínimas que sean, tienen consecuencias y a veces increíbles beneficios a largo plazo.
¿Y de verdad Bill Gates tiene razón que fue mala idea haberlo creado?
Segun la fuente, Bill argumentó que a él le hubiera gustado que la funcionalidad fuera iniciada una sola tecla, en lugar de la combinación de tres, para que fuera más fácil, y que a él nunca le gustó esta combinación pero que en ese momento David Bradley tomó la decisión y no hubo vuelta atrás.
En lo personal, yo creo que es una buena idea tenerlo a nuestra disposición para situaciones que lo requieran y creo que es una buena idea que la distribución de las teclas obligue a utilizar ambas manos ya que muestra intención de tomar esa acción. No me imagino la cantidad de situaciones precarias que nos pondría el hecho de que fuera una solo tecla con la cantidad de errores que cometemos al usar el teclado.
La intención es una parte fundamental en mejorar la productividad.
Por esta vez, Bill y yo no estamos de acuerdo en algo. Pero no te preocupes estimado lector, ni él ni yo perderemos el sueño por este desacuerdo.
¿Puedes identificar algunas consecuencias a largo plazo de pequeñas decisiones que has tomado? No olvides compartirme tú opinión sobre el tema.