No existen atajos para el éxito

En los últimos años he encontrado un gusto en la productividad y su aprendizaje. Por eso he empezado este blog, para compartir y reflexionar lo que voy aprendiendo. Hasta la fecha, he leído ocho libros dedicados a mejorar la productividad y trato de poner en práctica lo que aprendo a mi carrera profesional.

He tenido gratas sorpresas, como poder organizar mis días de una manera que cada minuto del día está asignado a una actividad y que me permite hacer más cosas en el mismo tiempo. Además, he descubierto que algunas de éstas técnicas funcionan para actividades fuera del trabajo, rutinas de casa o incluso para hobbies, como leer los mismos libros.

Pero también he tenido sorpresas no gratas, como por ejemplo, el hecho de que tengo días buenos (productivamente) y días que no salen como los planeaba. En algún momento compartiré más detalles sobre ese tema pero hoy mi reflexión va referente a esta otra “sorpresa”:

No existen atajos para el éxito.

¿Qué es el éxito en este contexto?

El éxito es cumplir con mis obligaciones del día en el trabajo: escribir código, resolver problemas, aprender nuevas cosas, aconsejar clientes con buenas prácticas y al final de cuentas, hacer que la empresa donde trabajo siga vendiendo software. Si el software se vende, el cliente es feliz, la empresa sigue adelante y yo sigo con mi trabajo.

Ciertamente, esto no representa el éxito de mi vida personal o incluso de mi carrera profesional a largo plazo, pero sin duda, es un sentimiento positivo el poder cumplir con mis tareas en tiempo y forma, resultando en clientes (y jefes) satisfechos. Esto es MI éxito a corto plazo.

Alcanzando el éxito

Hay actividades que son difíciles, diseñar un sistema o una solución es un claro ejemplo, hay que establecer criterios de éxito, formas de medir si va bien o mal, definir tiempos, comprometerse a entregables, compartir lo hecho, documentar la solución, entre otras cosas. Estoy seguro que todo trabajo tiene actividades complejas.

Tomando en cuenta lo anterior, para alcanzar mi éxito, necesito establecer un ciclo de pensar, actuar, retroalimentar. Repetir este ciclo es trabajo y ejercitar mi mente para concentrarse requiere de energía y esfuerzo. Es un trabajo duro mental.

Y también puedo decir que conozco el trabajo físico, habiendo trabajado en el negocio de la familia aprendí y viví el llegar cansado y adolorido físicamente a casa. También en su momento busqué mejorar la productividad del mismo. Tan difícil es el trabajo físico como el trabajo mental. Ambos tienen su lugar y en un futuro espero platicar mi punto de vista al respecto.

Si canalizo mi energía en mi trabajo actual, si evito las distracciones, si respeto mi tiempo al evitar interrupciones, podré alcanzar el éxito del día y disfrutar de un merecido descanso.

Mejorar hábitos de productividad permiten llegar al éxito, pero de ninguna manera hace que el trabajo sea más fácil. El hecho de que sea más productivo no hará que las soluciones de tecnología que hago sean menos complejas o tengan menos consecuencias.

La persona más productiva puede hacer software que no funcione y la persona menos productiva puede hacer un mejor software (aunque tarde más tiempo).

En algún momento caemos en el engaño que el hecho de ser más productivo todo se volverá más fácil, cuando la realidad es que el ser más productivo hace que el trabajo sea más eficiente aunque aún difícil.

¿Qué quiere decir esto?

Que en realidad, no hay atajos para el éxito. El trabajo duro no dejará de ser trabajo duro por mas técnicas de productividad que pueda descubrir. Tan pronto como hagamos paz con eso, podemos seguir adelante disfrutando el trabajo y encontrando métodos para ser más eficientes.

Entonces, ¿por qué mejorar mi productividad?

El hecho de que el trabajo siga siendo difícil, no quiere decir que desarrollar buenos hábitos de productividad nos permitan recuperar tiempo y que mejorar la concentración, el enfoque y la calidad de lo que hacemos.

Me interesa saber tu opinión, escríbeme a cavazos@hey.com y cuéntame que te pareció este artículo y si te gustaría que hablara de un tema en particular.

He empezado a compartir en mi círculo este blog porque quiero dedicar tiempo en reflexionar y compartir lo que voy aprendiendo para compartir lo que sé de tecnología y productividad. Si crees que esto le interese a alguien, no dudes en compartirlo con tus conocidos.

La mejor manera de recibir este contenido es subscribirse a la lista de correos en esta página, cada vez que escriba algo recibirás un correo con todo el contenido. O si lo prefieres, suscríbete vía RSS (aquí una guía de que es RSS)

Serene App – productividad para usuarios de Apple

Serene es una app con la iniciativa de mejorar la productividad de los usuarios. Aunque no he tomado tiempo exacto, puedo decir que he pasado aproximadamente dos horas utilizando esta app y creo que es una herramienta útil si tienes dificultades para concentrarte en el trabajo con tantas distracciones que hay en internet, especialmente, en la situación actual donde muchos trabajamos desde casa.

Han pasado varios meses de que analicé Freedom y he estado experimentando con otras apps de productividad, es momento de que comparta lo que he visto de Serene para qué consideres si decides darle una oportunidad en tu vida.

La app funciona de manera que activa bloqueos en aplicaciones y sitios web que causan distracciones por bloques de tiempo (sesiones), busca además crear rutinas para incrementar la productividad y que alcances un objetivo que tu mismo defines al momento de instalarla.

Impresiones

Sin un orden en particular estas son mis impresiones:

  • La app es bonita, los colores que utilizan son adecuados y no me ha generado frustraciones grandes. Es fácil de entender y configurar.
  • Me gusta que sea orientada a un objetivo específico y que busque inculcar una rutina en el usuario.
  • El costo es de 4 dólares mensuales (pagados anualmente, 48 en total) con una prueba gratuita de 10 horas de productividad.
  • Mi navegador principal es Safari y no existe una extensión para el mismo, un poco de decepción personal.
  • Genial para usuarios de Microsoft Edge (mi recomendación para la mayoría de gente) ó Google Chrome (mi menos recomendado) por su extensión. También cuenta con soporte para Firefox, aunque este navegador yo no lo utilizo y no probé la extensión.
  • Permite configurar el tiempo de cada sesión, lo cual puede ser muy útil para también establecer periodos de descanso y recuperar energía. Yo recomendaría empezar con sesiones de 30 minutos e incrementarlas poco a poco hasta llegar a 90 minutos.
  • Me agrada que utilicen el termino “deep work”, que aunque no he encontrado una traducción apropiada, se refiere a un trabajo intenso, productivo y con 100% de concentración, creado y popularizado por uno de mis autores favoritos, Cal Newport.
  • Tiene integraciones interesantes con herramientas populares de manejo de proyectos, por ejemplo, la habilidad de actualizar el estado en Slack (servicio de mensajería instantánea usado por muchas empresas), ajustar las luces del ambiente si cuentas con sistema de luces inteligente, entre otras. No he invertido tiempo en configuración de esta sección.
  • No me gusta el hecho de que cambia la pantalla inicial de Microsoft Edge y que no sea algo que, hasta donde pude investigar, se pueda deshabilitar.
  • Serene promete una versión para Windows, pero hasta el día de hoy podemos considerarla solo para Mac.

Conclusión

Como comenté anteriormente, para mí no es un requisito tener una aplicación de este tipo para ser productivo, pero sin duda es una herramienta muy útil para aquellos que sufren de distracciones y quieren recuperar ese tiempo perdido.

Hay muchas herramientas y técnicas que buscan ayudar con la productividad con diversas actividades y tips, por lo cual, no creo que exista “la herramienta perfecta para todos” sino más bien existe “la herramienta perfecta para mí”. Si necesitas un poco de ayuda en tu productividad busca experimentar 2 semanas con diferentes opciones para ver cuál es la mejor para ti.

Espacios para productividad al extremo

El conocido autor George R. R. Martin de Game of Thrones publicó hace unas semanas un artículo que me pareció interesante de analizar porque involucra la búsqueda de espacios para productividad al extremo y qué otros entusiastas de productividad han mencionado.

George tiene una cabaña en una montaña aislada con mala conexión a internet para poder “ponerse al corriente” y “aprovechar la pandemia” para terminar el siguiente libro de la saga. En ella, se mantiene aislado y tiene asistentes (que él denomina “minions”) que están al pendiente de lo que necesite, incluyendo la difícil tarea 🙄 de preparar café.

Dejando por un momento sus extrañas excentricidades y su manera despectiva de referirse a sus asistentes, es interesante el ver cómo este tipo de personas, que su profesión depende de niveles elevados de concentración, buscan crear espacios y dedicar tiempo para cumplir sus metas sin importar el costo.

Como George, existen muchas personas que gastan inimaginables cantidades de dinero para buscar objetivos como escribir y pensar mejor e inventar nuevas cosas. Es común que estas inversiones tengan buenos retornos, pero para muchos de nosotros no es posible o simplemente no es algo que queramos hacer en nuestras vidas.

Otra parte interesante se encuentra al final del artículo donde a pesar de decir que tiene una vida y haber escrito varios éxitos literarios él se pregunta si algún día podría hacer ambas cosas al mismo tiempo. Mi respuesta para él es: sí, pero no al extremo que tú necesitas o buscas.

¿Qué podemos aprender de George?

La soledad que busca (o necesita) George para poder continuar escribiendo es un extremismo que tiene como consecuencia el que no pueda “tener una vida”, sin importar la cantidad de dinero que tenga o gaste. Por lo tanto, para la mayoría de nosotros, personas que buscamos mejorar la productividad pero que también tenemos (y queremos) una vida, George Martin y su espacio para productividad al extremo es algo que no debemos de imitar.

Lo que sí podemos y debemos hacer es interpretar lo que otros hacen y adaptar mejores prácticas a nuestras situaciones y ambiente de trabajo para buscar ser más productivos. Para mí, el ser más productivo resulta en tener tiempos de calidad con las personas importantes y encontrar tiempo para dedicar a las actividades que me gustan.

Hay herramientas como Freedom que nos permiten evitar cierto tipo de distracciones al trabajar en la computadora y no tenemos que comprar una cabaña en medio de la nada para lograrlo.

Aun así podemos imaginar: Si el dinero no fuera limitante, ¿qué estarías dispuesto a comprar para reducir interrupciones e incrementar tu productividad?

Las consecuencias de pequeñas decisiones

¿Herramientas de Productividad?
¿Herramientas de Productividad?

Para la mayoría de los que hemos utilizado Windows en algún momento hemos presionado la combinación Ctrl+Alt+Supr (Inglés: ‌Ctrl+Alt+Del) para ciertas ocasiones. Esta es una pequeña historia de decisiones y sus consecuencias.

Algunos usos de esta combinación son: para autenticarse en una computadora corporativa, para cerrar aplicaciones, reiniciar el sistema o incluso para lidiar con la famosa pantalla azul de la muerte.

Hoy me encontré con un artículo (del 2013) donde Bill Gates pensaba que haber creado ese comando fue un error.

La historia de esta combinación de teclas data de principios de los años 90, de un ingeniero de IBM llamado David Bradley y fue creado con la intención de ser usado solamente por los desarrolladores del proyecto. Casi 30 años después y nosotros seguimos usándolo en Windows 10.

¿Cuáles son las consecuencias de estas “pequeñas” decisiones en la productividad?

Cuando hablamos de productividad, hablamos de tomar pequeñas decisiones con intención que nos ayudan a evitar distracciones, a mejorar la concentración y buscar recuperar tiempo para dedicarlo a actividades de relajación y diversión.

Desde que empezó mi carrera profesional he tratado de incorporar hábitos para ser mejor y, para mí grata sorpresa, hay algunos que ya cuentan con más de 10 años ayudándome. Si me hubiera preguntado el alcance que tendrían en el momento que los empecé, yo hubiera pensado que estarían conmigo mucho menos tiempo y ahora, es imposible cuantificar el tiempo que me han regresado.

Nuestras acciones, por muy mínimas que sean, tienen consecuencias y a veces increíbles beneficios a largo plazo.

¿Y de verdad Bill Gates tiene razón que fue mala idea haberlo creado?

Segun la fuente, Bill argumentó que a él le hubiera gustado que la funcionalidad fuera iniciada una sola tecla, en lugar de la combinación de tres, para que fuera más fácil, y que a él nunca le gustó esta combinación pero que en ese momento David Bradley tomó la decisión y no hubo vuelta atrás.

En lo personal, yo creo que es una buena idea tenerlo a nuestra disposición para situaciones que lo requieran y creo que es una buena idea que la distribución de las teclas obligue a utilizar ambas manos ya que muestra intención de tomar esa acción. No me imagino la cantidad de situaciones precarias que nos pondría el hecho de que fuera una solo tecla con la cantidad de errores que cometemos al usar el teclado.

La intención es una parte fundamental en mejorar la productividad.

Por esta vez, Bill y yo no estamos de acuerdo en algo. Pero no te preocupes estimado lector, ni él ni yo perderemos el sueño por este desacuerdo.

¿Puedes identificar algunas consecuencias a largo plazo de pequeñas decisiones que has tomado? No olvides compartirme tú opinión sobre el tema.

Productividad gracias a Freedom

En esta ocasión quiero compartir una aplicación que se comporta como un control parental para evitar distracciones y aumentar la productividad: Freedom1.

Para los que trabajamos en una computadora que está siempre en línea es muy común encontrar distracciones que afectan la productividad. Redes sociales, YouTube y su algoritmo de sugerencias, noticias y otras tantas.

En lo personal, tengo el privilegio de usar una computadora dedicada al trabajo donde sólo hay acceso a Twitter para compartir en lo que estoy trabajando (evitar lectura de tweets) y he desarrollado una disciplina de, conscientemente, evitar distracciones, pero aun así, a veces ha sido difícil y si hubiera sabido de esta herramienta antes, la hubiera usado más.

No siempre es posible tener las condiciones adecuadas para ser productivos y a veces necesitamos un poco de ayuda, aquí es donde entra Freedom. La primera vez que encontré esta plataforma fue relacionado con bloquear específicamente YouTube y hace un par de semanas en una lista de correo con noticias sobre tecnología.

Freedom simplemente se encarga de bloquear todo el contenido que consideramos distractor y anti-productivo. La captura de pantalla de la interfaz web:

El concepto es simple: Mientras una sesión esta activa no podemos acceder a ninguno de estos sitios.

Tiene 7 sesiones gratuitas y después ofrece diferentes planes dependiendo del tiempo de contratación. Entiendo que es difícil pagar por algo digital, pero si tu trabajo está relacionado con estar en una computadora y necesitas un poco de ayuda no dudo que es una buena inversión.

Además de Freedom, siempre es bueno tener el teléfono fuera del alcance de la mano. Más de esto en futuros artículos.

Estoy seguro de que a más de alguna persona le servirá y si decides usarlo y quieres compartir tu experiencia no dudes en contactarme. En lo personal he empezado a usarlo en algunas ocasiones y me ha funcionado perfectamente.


  1. Freedom no me ofrece ninguna compensación por esta recomendación. ↩︎